El trabajo luces de carretera se compone de mas de 100 imágenes realizadas en transito la mayoría en el corredor mediterráneo de Alcira a Perpiñán.
El trabajo ha sido expuesto en tres ocasiones:
Sporting club de Russafa 08/03/2019
Jativa: 28/6/2019
Colegio de Caminos canales y puertos de Valencia. 10/12/2021
Este trabajo fotográfico, que puede llamar la atención por la ausencia de figuras humanas, es en realidad un homenaje al ser humano y a una de sus principales necesidades, la comunicación, la ansiedad por conocer y relacionarse. La necesidad de viajar.A caballo en carro, vehículo propio, tren avión… La evolución humana es la evolución del desplazamiento en una constante adaptación a los tiempos. Por mucho que cambie el mundo siempre estará ahí esa necesidad básica de desplazarse para conocer otras formas de vivir, otras culturas, otras ciudades, comunicarse, compartir y aprender.Las imágenes arraigadas en mi memoria, de viajes en coche cuando era niño, desde el asiento de atrás, sirven de punto de partida para este trabajo.Por el limitado espacio de mi ventanilla se abría el más vasto mundo pendiente de conocer. Este escenario te provocaba ilusiones, sueños, observando líneas, curvas, paisajes naturales y artificiales pero sobre todo luces, luces que dibujaban escenas cambiantes.Al caer la tarde aquel espectáculo tenía un sabor especial, un aspecto encandilador. Las luces del ocaso llevaban intrínsecamente una gran dosis de fantasía, de imaginación, de misterio. Las luces rilando a lo lejos me hacían soñar con el futuro, lo des-conocido, lo que está por llegar.
Fernando Rincón
Bajo el título “Luces de Carretera” el fotógrafo y video-creador Fernando Rincón nos presenta una serie de instantáneas, la mayoría tomadas desde un automóvil. Se trata de imágenes que transitan de manera recurrente por la memoria colectiva. Puntos de fuga, desenfoques creados por el propio movimiento, encuadres desequilibrados, luces y asfalto, carteles de locales de paso… nos sugiere la fugacidad de la vida, de momentos que se pierden en el tiempo y el espacio. Son composiciones llenas de misterio y de belleza que el artista plasma con gran maestría. Estas imágenes borrosas, difusas e imperfectas son la elección de un código personal para representar la realidad. Una realidad subjetiva y que no siempre ha de ser coincidente con el espectador, ya que se trata de secuencias abiertas a diferentes interpretaciones.En este caso Fernando Rincón se aleja de la mera fotografía documental o representativa para dar paso a un cóctel de sensaciones.
Rafa de Corral.
El pasado día 28 de junio se inauguró en La Colectiva de Xàtiva “Luces de carretera” una exposición de fotografías de Fernando Rincón con un total de 24 obras, incluido un tríptico y un díptico, con formato 30 x 45 cm.
La serie y/o colección que presenta Fernando Rincón no es sólo un conjunto de imágenes bellas y bien resueltas, nos cuenta historias y transmite emociones, pues tenemos delante a un observador de la realidad que casi de continuo está abstraído en la elaboración de una idea y cómo desarrollarla.
Palabras como “distancia”, “destino”, “soledad”, “saudade”… pudieran ser ciertas cuando dentro del automóvil, guiado por las luces en la noche provocan sentimientos en la soledad de la vía.
Imágenes captadas de instantes que recuerdan a tantas películas vistas y a la vez tan reales de nuestro entorno cercano y asimismo, con los matices mágicos de los reflejos conseguidos, nos invita en algunas a la melancolía y en otras a la memoria de noches gozosas.
Fernando nos convoca a dejar una vida detrás y volver a empezar viaje; a dejarnos llevar después de repostar combustible puro y duro y sólo disfrutar de un paisaje, que a pesar de la estética urbana impuesta, ofrece belleza si quieres mirarla.
Sales Prats
